Matthia está a punto de mudarse a Madrid para estar con su novio Eduard, para no tener que revelarle a la familia que es gay. Eduard, sin embargo, está convencido de que su matrimonio cuenta con la bendición de todos los miembros de la familia. El día antes de que Matthia parta hacia España, Eduard anuncia su llegada a Roma para reunirse con sus suegros. Matthia ahora debe elegir entre sincerarse finalmente con su compañero o confesar que es un mentiroso formidable.