Rebecca Ferguson, la estrella de la serie Misión imposible, interpreta a una espía americana que se enamora de su objectivo, un politico rusa, en este thriller nítido del Cold War. Sasha (Charles Dance), ahora un viejo que vive Nueva York, nunca ha superado la pérdida de Katya (Ferguson). El película hurga en sus recuerdos dolorosos: una aventura peligrosa en el mundo oscuro de Rusia de los años 60s, y los circunstancias misteriosas que lo terminó.